Acondicionamiento y reparación realizada en 2016

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Tras la destrucción del órgano antiguo de la iglesia de San Lesmes, ocurrida en un incendio en octubre de 1918, las primeras propuestas para la construcción de uno nuevo fueron enviadas al año siguiente por la firma Eleizgaray y Cía. de Azpeitia. No obstante, sería en 1924 cuando a instancias del cardenal Benlloch, arzobispo de Burgos, y dadas sus notables y reconocidas aptitudes como organista, el proyecto fue encomendado al organero de origen alemán, Juan Melcher, establecido entonces en Vitoria. Dicho proyecto fue expuesto públicamente en los escaparates de Pedro Ruiz de la capital alavesa. Una vez concluida la construcción del órgano y su instalación en la parroquia, fue inaugurado en diciembre de 1925 bajo las manos de José Mª Beobide, organista de la iglesia de la Merced de Burgos, y Emilio Rayón, organista de la catedral.

 

Los trabajos consistieron básicamente en el apeo de la tubería para proceder a una limpieza general del instrumento. Una vez que el órgano quedó despejado interiormente, se aprovechó para realizar una detenida revisión de todas sus partes. Entretanto, se aplicó un tratamiento preventivo contra carcoma, tras lo cual tanto a la caja como a la consola se les dio un ligero toque de cera natural. Por otro lado, se fueron sustituyendo pieles, tuercas de cuero y almohadillas neumáticas deterioradas, principalmente en aquellos lugares de difícil acceso. Se verificaron y repararon las deficiencias de los mecanismos de las transmisiones de notas y de registros, así como del sistema neumático, en los cuales se ajustó y se verificó nuevamente su funcionamiento. En esta misma línea, se ajustaron y regularon los teclados manuales, el pedalero, las pisas de acoplamiento, los pulsadores de registro, etc. La tubería se encontraba en un estado de conservación aceptable, por lo que solo fue necesario limpiarla cuidadosamente, para luego ser debidamente calibrada y regulada en el proceso de afinación.